© Pazo Baión /
Pazo Baión. Historia, arquitectura, vino y naturaleza
El Pazo Baión recibe su nombre de la parroquia en la que se ubica, en Vilanova de Arousa, un municipio costero pontevedrés, entre la ría de Arosa y la ría de Pontevedra. Conocido también como la Granja Fontán, es una de las fincas más representativas de Galicia por sus torres victorianas.
© Pazo Baión
© Pazo Baión
© Pazo Baión
© Pazo Baión
© Pazo Baión
E ste conjunto de casa señorial y bodega centenaria rodeada de viñedos forma un microuniverso donde se dan cita diferentes espacios naturales característicos de los pazos gallegos. De linaje noble, su leyenda habla de siglos de luces y oscuridad, que dejaron huella.
Sus orígenes se remontan al siglo XV, cuando fue residencia de los Señores de Soutomaior; más tarde —durante los siglos XVIII y XIX— acogió a algunas de las familias más destacadas de Galicia, como los Figueroa o los Conde de Priegue, y posteriormente al último rey de Portugal, Manuel II.
En 1928, Adolfo Fojo Silva, un próspero emigrante gallego que había amasado una considerable fortuna en Argentina a través de la importación de tejidos, regresó a Galicia y adquirió la propiedad. Fojo ordenó su completa reforma y reconstrucción, añadiendo unas torres victorianas y palmeras. En aquella época, las casas que contaban con un ejemplar en su jardín pertenecían a los indianos que habían hecho fortuna en América.
Mientras se estaba rehabilitando, la cedió a su hijo Narciso Fojo y a sus 14 nietos. Por esta razón, durante largo tiempo se conoció como la Finca de los Fojo. En aquella época, el Pazo se dedicaba a la agricultura y la ganadería, y producía cierta cantidad de vino que era comercializado por sus propietarios. Los últimos herederos del Pazo Baión vendieron la posesión a una sociedad empresarial que, además de instalar una de las más modernas industrias lácteas de Galicia, realizó la primera plantación técnica de Albariño de Rías Baixas. Este viñedo fue pionero y referencia para todos los profesionales del sector.
© Pazo Baión
© Pazo Baión
© Pazo Baión
© Pazo Baión
En 1987, las casi 300 hectáreas de fincas y viñedos pasaron a manos de una sociedad formada por los narcotraficantes Laureano Oubiña, Sito Miñanco y Pablo Vioque, aunque sus titulares reales fueron Laureano Oubiña y su mujer, Esther Lago. La pareja, que nunca llegó a vivir en el Pazo, dejó de lado la tarea de cuidar las parras, lo que ocasionó un descenso de la productividad de los viñedos. Aquí comenzaba la etapa más polémica y compleja de la mansión pues era un secreto a voces que la escasa producción vinícola tenía como fin el blanqueo de capitales. Baión fue señalado como un símbolo de la ostentación y la impunidad de los narcos hasta la llegada de la conocida como Operación Nécora, que terminó con la detención de varios capos.
Para evitar la paralización de la empresa, el Estado español la alquiló en 1996 a la empresa catalana Freixenet, que mantuvo durante trece años su explotación. El 16 de julio año 2008 la bodega Condes de Albarei adquirió la bodega Pazo Baión emprendiendo un importante proyecto vitivinícola y enoturístico.
El complejo actual, “un chateau entre viñedos”, dispone de una residencia con salón-comedor para actos y celebraciones con capacidad para 300 personas, centro de reuniones, cursos de formación, espacios de cata, así como una nueva bodega boutique, original enoteca, exclusivo wine bar, zonas verdes, la antigua vivienda de los caseros, la antigua vaquería, la bodega vieja y el palomar. Todo ello ha convertido al lugar en el primer centro de enoturismo de Galicia y único en España por sus características e historia.
© Pazo Baión
© Pazo Baión
¿Te gustaría que contáramos la tuya? ¡Escríbenos!
Presume de buen gusto compartiendo este artículo…