© Pazo Quinteiro da Cruz
Pazo Quinteiro da Cruz. El bosque de los escritores gallegos, donde el vino y la camelia encuentran su paraíso
El Pazo Quinteiro da Cruz está situado en el valle del Salnés, en la parroquia de Lois, en el concello de Ribadumia (Pontevedra) y amparado por la DO Rías Baixas. Se trata de un conjunto arquitectónico y natural con tres hectáreas de viñedos de Albariño que se extienden a lo largo del valle.
© Pazo Quinteiro da Cruz
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La mansión solariega, construida en 1790, es historia viva del neoclasicismo gallego. Reúne todos los elementos de la arquitectura popular autóctona: fuentes de piedra, jardines, estatuas y relojes de sol.
La finca también cuenta con dos cruceros —destaca especialmente el más cercano a la casa— un gran hórreo de piedra (también del siglo XVIII) de más de 15 metros de longitud y otro de piedra y madera —del siglo XIX— ubicado sobre un estanque al que se accede por una doble escalinata de piedra de la época. Dispone además de una capilla del siglo XVI, una pila bautismal de finales del siglo XII, un palomar almenado y un lavadero que evocan un romanticismo de carácter profundamente gallego. Completan la espectacular estampa un alpendre de piedra con una antigua lareira, un lagar y diversos aperos de labranza catalogados en el patrimonio histórico vitivinícola europeo y en el patrimonio histórico-artístico de Galicia.
En el Pazo y sus alrededores se han rodado diversos programas de televisión y películas. Sus jardines de inspiración francesa, de finales del siglo XIX, son obra del paisajista francés Martín Dorgambide. La zona de más reciente creación fue diseñada por Victoriano Piñeiro Acosta (1975-1980) quien restauró la flora existente de acuerdo con la tradición histórica, y añadió la magnífica colección de camelias. Además de otras plantas importadas de diferentes lugares del mundo, cuenta con más de 5000 ejemplares de casi 2000 variedades diferentes de excelencia internacional. No es de extrañar que, en su día, incluso apareciese en uno de los catálogos de Coco Chanel.
La primera camelia amarilla que llegó a Europa prendió en este jardín. Con ella se elabora toda una línea cosmética que, aseguran, cuenta con seguidores en todo el mundo por sus propiedades antienvejecimiento.
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Además, el Pazo Quinteiro da Cruz presume de un bosque muy especial: algunos de sus árboles han sido plantados por prestigiosos escritores gallegos como Manuel María o Camilo José Cela, quienes a cambio dedicaron uno de sus textos al lugar. También los poetas Manuel Filgueira Valverde, Blanco Mariño, Bouza-Brey, Ulises Bértolo o la brasileña Nélida Piñón, entre otros, pusieron su semilla en este paraíso, cuna del primer Congreso de Poesía Gallega.
La bodega del Pazo, que atesora más de 30 años de historia, se enmarca dentro de la denominación de origen Rías Baixas, uno de cuyos vinos fue elegido para regar la boda de los actuales Reyes de España.
Tres hectáreas de la finca están dedicadas a la producción de uva albariño, que brinda una producción moderada y tres tipos de vino distintos: Quinteiro da Cruz (clásico), Albariño Allier Quinteiro da Cruz (fermentado en barrica de roble) y —cuando las añadas y el clima lo permiten— Albariño Quinteiro da Cruz vendimia tardía. Las etiquetas de estos vinos están ilustradas por pintores gallegos como Miguel Piñeiro, Manolo Ruibal o Ramón Conde.
El sector vitivinícola lleva varios años reinventándose y diversificando su negocio, por ejemplo a través de la organización de eventos, o consolidándose en el mundo del turismo enológico, muy extendido ya por toda Galicia. Pero los actuales propietarios del Pazo, Beatriz y Pedro Piñeiro han querido ir más allá y han pasado de producir únicamente vino albariño a añadir té verde a su catálogo. Para ello utilizan la variedad de Camellia sinensis, cuyos brotes y hojas se utilizan para la elaboración de esta bebida milenaria, que ofrecen a los visitantes y también comercializan, junto con una línea de cosmética.
En este entorno privilegiado se puede disfrutar de un día de té, de un taller de escritura, de un inolvidable atardecer en la piscina con degustación de un cóctel de albariño o de eventos sociales como bodas.
© Pazo Quinteiro da Cruz
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